Para poder alcanzar semejante monstruosidad de transmisión, los grupos investigadores han desarrollado un ingenioso nuevo tipo de fibra óptica. Para que nos hagamos una idea, las fibras standard actuales alcanzan los 4 u 8 Tb; como explican los investigadores, es como pasar de una autopista de un solo carril a una de siete ¡de dos pisos! Con una fibra así se abre la puerta para alcanzar hasta Petabits de transmisión, que supone el nuevo límite para la investigación y cuya fecha estimada es el 2020.
Revolucionando la fibra óptica
La verdadera protagonista de este hallazgo es la nueva fibra óptica desarrollada. Los grupos de investigación publicaban ayer en Nature Photonics un artículo donde explicaban los fundamentos de su nuevo tipo de fibra óptica. Esta consiste en una fibra multinúcleo, es decir, que aprovecha la capacidad espacial en tres dimensiones para incrementar la tasa de transmisión, altamente eficiente. Con esta nueva fibra óptica, de diseño propio, los investigadores han conseguido demostrar la viabilidad de obtener un ratio de 5.1 Tb en una sola honda y en una sola fibra.
Siguiendo este desarrollo, con 50 fibras de las que consta la estructura de esta nueva fibra óptica, podemos obtener una transmisión de 255 Tb, grosso modo, en una conexión de un 1km de fibra, según se ha demostrado en el laboratorio. Como decíamos antes, si las fibras standard actuales alcanzan entre 4 y 8 Tb, hablamos de poder aumentar la transmisión hasta 21 veces, aproximadamente, lo que nos permitiría olvidarnos, al menos durante un largo periodo de tiempo, del temido «data crunch» y nuestra creciente necesidad de ratios de transmisión monstruosos. La nueva fibra óptica ocupa prácticamente el mismo espacio que los cables de fibra actuales, así que no supone un engorro mucho mayor.
Combatiendo al gran «Data Crunch»
El llamado data o capacity crunch es un concepto que viene de la mayor exigencia de datos que tenemos los seres humanos en nuestra vida cotidiana. Como imaginaréis, capa persona y cada día consume una cantidad verdaderamente remarcable de datos. Con una mayor cantidad de gente usando sus plataformas móviles para conectarse a internet, la apertura de nuevas puertas de comunicación entre grandes empresas y laboratorios o la inimaginable cantidad de información con la que trabaja cualquier servicio que necesita bucear en los límites del «Big Data», tarde o temprano nos topamos con una imposibilidad tecnológica de proveer del servicio necesario.
Esta realidad viene preocupando a los expertos en telecomunicaciones desde un tiempo atrás ya que cuanta más información, más dependencia de ésta y por tanto crece exponencialmente la necesidad de una transmisión de datos fluida. Una opción para poder afrontar esta necesidad es incrementar el poder de las señales que viajan por la fibra óptica, pero esto tiene una serie de consecuencias que limitan la cantidad de datos que pueden ser transmitidos satisfactoriamente.
Con esta nueva fibra óptica de siete núcleos resolvemos el problema gracias a su enorme capacidad de transmitir información. Además abre la puerta, como explicábamos, a continuar aumentando la capacidad de banda ancha y transmisión de datos. De esta manera podríamos haber resuelto nuestros miedos a quedarnos sin una conexión los suficientemente potente. No sabemos cuando veremos implementado esto en nuestras redes cotidianas aunque probablemente los primeros en comenzar a usarlo, de aquí a unos años, sean los laboratorios y las grandes empresas. Los usuarios tendremos que esperar un poco más para ver en qué nos afecta, pero será positivo miremos como lo miremos.