Rusia es un país especial. No por tener a una persona como Puttin en lo alto de la cadena de mando (que también) si no porque van por libre en la mayoría de sus movimientos y decisiones. Si ya habíamos hablado en el pasado sobre su obsesión con que Apple espía hoy tenemos una nueva ración ya que Rusia ha pedido a Apple su código fuente para confirmar, de una vez por todas suponemos, que ni su software ni su hardware tiene puertas traseras que permiten espiar a los usuarios.
El gobierno del país euroasiático exige esto después de los numerosos rumores que han salido en los últimos días asegurando la existencia de puertas traseras en iOS (y Apple desmintiéndolo unas cuantas veces). Según parece el ministro de comunicaciones Nikolai Nikiforov ha pedido a Apple formalmente que muestre su código fuente, ya sea directamente o a través de una tercera empresa como ya hizo Microsoft en el pasado.
Apple aún no ha respondido a esta petición pero personalmente me parece una petición absurda. Aunque estoy siempre a favor del código abierto, comprendo que haya empresas que quieren mantenerlo cerrado para proteger su tecnología, sus algoritmos y, todo sea dicho, sus fallos de seguridad. Poniéndonos tan paranoicos como los rusos ¿quién dice que no pudieran utilizar el código e Apple en su contra en algún momento si se lo entregan?
De no entregar el código a Apple se le podría presentar un problema ya que no sería raro que Rusia le pusiera problemas a Apple si no siguen sus instrucciones. Por es razón es bastante probable que desde Cupertino intenten llegar a algún acuerdo con el Gobierno Ruso después de esta petición, ya sea utilizando alguna empresa auditora que asegure lo que llevan diciendo tiempo o algún otro tipo de trato que le resulte rentable a Puttin y compañía.
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