Hace tiempo vimos cómo en California se estaban planteando reciclar las aguas fecales para utilizarla como agua potable. Puede parecer asqueroso pero según los expertos es una solución más higiénica y útil para el consumo humano. Volvemos a la costa oeste de Estados Unidos para traeros un nuevo caso de aprovechamiento.
Alphabet Energy es una empresa localizada en California, Estados Unidos, y su próximo lanzamiento consiste en un material capaz de convertir el calor en electricidad. No es la primera vez que se trabaja con materiales termoeléctricos pero esta compañía promete conseguir buenos rendimientos de forma muy económica.
La tetraedtrita promete un mejor rendimiento
Los materiales termoeléctricos permiten convertir una diferencia de temperatura en electricidad gracias al flujo de electrones de un área caliente a otra más fría. De este modo se consigue convertir el calor residual de muchas máquinas en energía que se podría utilizar.
El calor residual, para quien no conozca el concepto, es el que se produce en algunas máquinas cuando están realizando su tarea. Históricamente es algo que no se ha podido aprovechar porque los materiales termoeléctricos son muy costosos a la hora de desarrollar y su eficiencia a la hora de convertir energía es discutible.
La solución que propone esta compañía californiana es usar la tetraedrita, un mineral del grupo de los sulfuros muy abundante. Es fácil de extraer y en Europa hay varias minas donde se pueden extraer diferentes variedades de tetraedtrita, incluso en España (Alpartir, Zaragoza).
Es un material económico de extraer: 1 kilo de tetraedrita se extrae por 4 dólares mientras que los materiales termoelécricos que ahora se utilizan pueden llegar a costar 126 dólares. Su eficiencia es mejor: actualmente se está consiguiendo un rendimiento del 2,5% en el calor que generan los coches. Con este mineral oscila entre el 5 y el 10%.
Aunque su futuro es prometedor hay que tener en cuenta que los porcentajes todavía son escasosy que su uso está pendiente de estudio: no se sabe si es un material que pudiera ser tóxico y se desconoce hasta qué punto se puede optimizar su rendimiento.