Honda, como buena marca japonesa, tiene múltiples áreas de actividad. Además de las conocidas motos, su departamento de robótica es uno de los veteranos del sector -nació oficialmente en el año 2000-. Por eso ASIMO lleva años deleitándonos con avances en robótica antropomorfa tan interesantes como su forma de andar o de subir escaleras bípeda, como la no menos divertida forma de caer.
Ahora Honda ha dado un nuevo impulso con la renovada versión de ASIMO que cuenta con novedades como una cara más expresiva que incluye ojos/cámaras y una sonrisa. Tampoco se puede olvidar un importante avance en el manejo de las manos y los dedos para interactuar con objetos cotidianos diseñados para los seres humanos como botellas o vasos.
Pero las principales mejoras van por dentro, en su inteligencia artificial que ahora es capaz de predecir e interactuar con el entorno físico (incluso en movimiento) de forma notablemente mejorada y también mucho más rápida. Corre, salta y camina hacía atrás, de momento sin percances registrados.
Y por supuesto, un sistema de interacción con seres humanos capaz de distinguir voces y caras, aunque estén hablando simultáneamente. Eso sí, sigue siendo bajito -130 cm y 50 kilos- y siempre se mueve con su eterna mochila a la espalda.